Tinta y Acordes: PLAY

Dale al PLAY:

¡"El Rey Trasgo" saldrá en Julio de 2012!

Artista: Alberto Morán Roa

Album: El Rey Trasgo

Track 1: Si tu libro se llevara a la gran pantalla, ¿quién te gustaría que sonara en la Banda Sonora?

Puestos a soñar me gustaría que fuese una banda sonora muy ecléctica, aunque me temo que no terminaría de encajar en Hollywood: incluiría mucha música étnica, metal ambiental y folk, con matices medievales y tradicionales; sería un cajón de sastre en el que cabrían grupos como Faun, Schelmish, Agalloch o Summoning. ¡Necesitaría a alguien para poner orden! El objetivo sería que reforzase la atmósfera: medieval y oscura, en la que hay sitio tanto para la melancolía como para la épica.

Track2: ¿Sueles escuchar música cuando escribes?, en caso afirmativo ¿A quién?

Constantemente. Cuando escribo necesito sentirme en el lugar de los personajes y recrear escenarios en mi mente, y para ello no hay mejor aliado que la música: construye paisajes a mi alrededor, me hace viajar hasta aquello que estoy describiendo, juega con mi estado de ánimo hasta convertirme en espectador directo de aquello que estoy narrando.

Si quiero escribir sobre una batalla en la que cada metro se arrebata con sangre necesito algo que me haga vibrar, heavy metal con doble bombo y riffs, potente, evocador: Ensiferum, Equilibrium, Eluveitie. Si necesito hilar un diálogo o un pasaje calmado escucho las melodías de grupos como Omnia, Van Canto o Faun.

Track 3: En una firma de libros, ¿A quién te gustaría encontrar con tu libro bajo el brazo? (y me refiero a "momento fan" en plan "tengo arritmia y sudores fríos")

Sospecho que ver mi libro bajo cualquier brazo va a ser suficiente para provocarme sudores fríos, respiración entrecortada y el mundialmente famoso Balbuceo de Alberto Morán Roa. ¡Cronometre cuánto tarda en formular una frase coherente, si excede los tres minutos le regalamos una cubertería!

No obstante y ya que hablamos de música, si Serj Tankian -cantante del grupo System of a Down- llega a comprar un ejemplar de El Rey Trasgo, espero que alguien tenga un desfibrilador y una pastilla de nitroglicerina bien cerca. System of a Down se ha hecho un hueco durante años en mi repertorio hasta formar parte de mi vida, y que la piedra angular del grupo se interesase por mi novela garantizaría un momento "chillidos de colegiala" la mar de divertido para los asistentes.

Track 4: ¿Cuál es tu capítulo favorito de "El Rey Trasgo"?

Es una pregunta muy difícil pero me voy a quedar con el penúltimo, Añil y Rojo. Es un capítulo en el que las dos grandes tramas de la novela confluyen con violencia, un clímax de los de pulso acelerado y páginas pasadas a toda velocidad: la telaraña que lleva tejiéndose desde las primeras páginas concluye al fin mientras todo parece derrumbarse en torno a los personajes, todos los acontecimientos se precipitan sin frenos hacia una conclusión... y un enigma tiene al fin respuesta.

Escribirlo fue todo un subidón, a falta de una expresión mejor: los dedos volaban sobre el teclado en algo que solo puedo describir como un momento de genuina conexión con la novela. Algo increíble y muy satisfactorio.

Track 5: ¿Qué parte te cuesta escribir más, el principio o el final de una novela?

El principio, desde luego. Con El Rey Trasgo se dio una situación compleja, casi contradictoria: por un lado quería presentar y explicar muchas cosas, poner en situación al lector y ubicarlo en un mundo nuevo que no conoce, pero por otro no quería excederme, quería que fuese una introducción asequible y ágil.

El final es de las primeras cosas que defino. A partir de ahí, me voy haciendo preguntas "marcha atrás". ¿Cómo han llegado a esta situación? ¿Qué ha propiciado este encuentro? ¿Por qué este personaje quería que los sucesos tuviesen lugar así?

Track 6: ¿Escribes a mano o a ordenador? ¿Manías a la hora de escribir?

Escribo a ordenador pero las notas, los esbozos de las tramas y la estructura de la novela las escribo a mano, con ayuda de post-its de distintos colores. Me ayuda a definir ideas, a hilarlas y vincularlas, a encajar tramas, a buscar exactamente aquello que quiero escribir. Anoto frases sueltas, posible desenlaces... es muy divertido, la verdad, y lo lleno todo de órdenes a mí mismo ("¡Haz esto y esto otro! ¡No hagas esto, es una mierda!") y dibujitos en los márgenes.

¿Por qué hago esto a mano? Pienso bien mientras viajo y no me gustan los ordenadores portátiles: he apuntado cosas en el metro, en tren... Me gusta escribir ideas, tacharlas, reescribirlas, ver cómo progreso. Tiene un elemento de ritual, de proceso íntimo que escribir con un ordenador no puede replicar.

Track 7: Ally McBeal, tenía una canción que sonaba en su cabeza para insuflarse ánimo y valor, ¿cuál sería la tuya?

Son dos. Una es Steadfast, de Forefather. Es una canción potente sobre echarle valor a la vida, soportar los envites con estoicismo y la cabeza alta. La otra es So far away, de Staind, pausada y agradable, sobre lo mucho que cambiamos con el tiempo, aprender a perdonar los propios errores y ver lo que hemos vivido con perspectiva y madurez. Me aportan mucho, cada una en su momento y dependiendo del estado de ánimo.

Track 8: ¿Recuerdas algún libro de los que te obligaron a leer en el colegio/instituto?

Recuerdo con poca simpatía La Madre, de Gorki. Yo era un adolescente con aparato, gafas y camiseta de grupos de power metal. Quería leer sobre ficción, fantasía, terror, vivencias intensas y experiencias inimaginables, algo que rebosase imaginación. Y nuestra profesora de filosofía, no dudo que con su mejor intención, nos metió de lleno en el costumbrismo ruso. Recuerdo avanzar frase a frase entre resoplidos y hacer una lectura diagonal de la mayoría de sus páginas.

Los padres y profesores tienen una gran responsabilidad a la hora de recomendar libros a sus hijos y alumnos. Pueden avivar el fuego de su curiosidad o extinguirlo durante años. Mis alumnos -soy profesor de inglés- protestan por tener que leer cosas como La Regenta o La Casa de Bernarda Alba, pero luego devoran literatura juvenil o Canción de Fuego y Hielo. Están deseando leer, pero desde el programa educativo se transmite una imagen apolillada y antigua de los libros. Los clásicos tienen un lugar de honor en la literatura, qué duda cabe, y es importante conocerlos, pero quizá debería debatirse su papel, sus efectos en el alumno y su protagonismo en el plan educativo.

Track 9: ¿En cuál de tus personajes creados te convertirías?

Si puedo elegir me quedaría como estoy; me explico: mis personajes viven en un mundo duro, difícil, donde la muerte no es algo que se ve por la tele sino que forma parte del día a día, lleno de criaturas extrañas, magia y misterio. Muchos de ellos están solos, mutilados física o emocionalmente, o conducidos a destinos muy aciagos. Pero sin embargo perseveran, aprietan los dientes y descubren qué es aquello por lo que merece la pena seguir adelante: algunos motivos son nobles, otros retorcidos y siniestros; algunos nacen de los valores, otros de la desesperación. Algunos personajes encontrarán en esos motivos la clave para sobrevivir. Otros se quedarán en el camino.

Así que prefiero quedarme en mi pequeño mundo, con mi novia y mi gato, sin miedo a que me recluten para una leva, a que las hadas me secuestren y me conviertan en una de ellas o a que una migración de dracos sobrevuele mi vecindario y decida que tengo pinta de estar para chuparse las zarpas.

Track 10: Te conceden un año sabático sólo para escribir en el país que prefieras, sin más obligaciones que te retengan; ¿Dónde irías?

¿Solo uno? ¡Bueno, encima de que me dan un año entero! Me encantaría contagiarme de la desbordante atmósfera de Japón o aislarme en una cabaña en Noruega en función de lo que me pidiese el cuerpo, pero si he de elegir un país, ese es Alemania. Escribir desde una casa de madera en algún pueblo rodeado de verde, frío y lluvioso; hacer escapadas a ciudades que conserven el legado arquitectónico y cultural renacentista y del Sacro Imperio, que me fascina y me inspiró para escribir una de las naciones clave de El Rey Trasgo; perderme en sus bosques interminables y ver el Mar del Norte. Y la cerveza, ¡oh, la cerveza! Sí: Alemania.

*Bonus Track: Algún consejo para autores noveles.

Esto va a ser largo pero a mí me hubiese gustado leer algo así, de modo que allá va. Chicos y chicas, consejos de novel a novel:

Tened claro qué queréis contar, de qué queréis hablar y cómo queréis hacerlo, que queréis transmitir y qué reacciones queréis buscar en el lector: lo estáis guiando por vuestra historia: cread un viaje inolvidable para él. Confiad en vuestra pericia y en que las buenas ideas os llevarán a otras buenas ideas.

Perseguid la excelencia. Sed muy, pero que muy críticos con vosotros mismos. Explorad vuestras fortalezas y debilidades, vuestras manías, indagad vuestros manuscritos en busca de errores, agujeros argumentales, incoherencias. Revisadlo a fondo. Documentaros (sí, también para escribir género fantástico). No dejéis de trabajar y de esforzaros por mejorar jamás. Contactad con varias personas que os hagan críticas constructivas, que os busquen los defectos y hasta las cosquillas, que os cuestionen, que no tengan miedo de decir en qué os habéis equivocado, que os hagan preguntas acertadas y os ayuden a encontrar vuestra propia voz. Sed constantes, ordenados y conscientes de que hay días mejores y días peores.

No tengáis prisa por publicar, sed pacientes. No caigáis en la trampa de la coedición ni publiquéis un producto apresurado. Tirad el ego por la ventana: solo conduce a pensar, decir y hacer estupideces. Tened una mente abierta y sed humildes y agradecidos con las personas que os han ayudado.

Y disfrutad. Saboread esta experiencia fascinante que es escribir.

Muchísimas gracias a Elena por la oportunidad de participar en Tinta y Acordes. Ha sido un verdadero placer.

Sinopsis:

Han pasado ocho años desde que el imperio de Kara desapareció, convertido en polvo añil por un poderQue escapa a toda comprensión.

La Ciudadela, silenciosa guardiana de la paz gobernada por tres naciones, vigila los reinos del hombre navegando los cielos.

En un pueblo del frío norte, dos amigos descubrirán un libro vinculado a un enigma del ayer y a un hombre entre la vida y la muerte.

Nacido de la pluma de un poeta, les descubrirá los secretos que moran en las montañas a través de una historia en la que conservar la vida vale más que conservar la humanidad.

El mundo apura sus últimos latidos...

Y en la cima de los Picos Negros, contemplando el paso del tiempo entre delirantes pensamientos, el Rey Trasgo aguarda el momento de construir sus sueños a partir de sus cenizas.